Una casa pasiva es
aquella que, gracias al diseño, consigue reducir la demanda de energía de la
misma, de manera que apenas se necesita consumir energía para la calefacción;
de hecho, es casi nulo. Pero eso no significa que las casas pasivas no reciban
facturas energéticas: se sigue igualmente necesitando la luz para la nevera, el
frigorífico, la calefacción… Por eso mismo conviene saber conocer cuáles son
las tarifas energéticas más adecuadas para tu casa pasiva.
¿Qué hace una casa pasiva para ahorrar energía y ser sostenible?
El ahorro energético de una vivienda pasiva se consigue gracias a los siguientes puntos que a continuación te detallamos:
● Una vivienda pasiva se construye teniendo en cuenta la posición del sol a lo largo de todo el día de manera que la vivienda sea muy luminosa durante el mayor tiempo posible.
● Las paredes de las casas pasivas se construyen con materiales sostenibles y que además producen un alto aislamiento térmico. Materiales como la madera son algunos de los más usados por las casas pasivas tal y como se puede leer en este artículo.
● Las ventanas de la vivienda son de PVC o de aluminio o cualquier otro material que permita un correo aislamiento térmico.
● Las viviendas de la casa pasiva suelen ser LED no solo porque son de bajo consumo sino que además permiten adaptan la iluminación a cada situación en concreto.
● Para la calefacción, las casas pasivas pueden utilizar climatización geotérmica que es una de las más sostenibles del mercado.
¿Qué otras ventajas tienen las casas pasivas?
Las casas pasivas prefabricadas son una de las modalidades que más éxito ha tenido en los últimos tiempos en primer lugar porque tienen un coste mucho más barato y además, al ser modulares, hacen que la ampliación de la misma sea mucho más fácil. Por supuesto, este tipo de viviendas se construyen rápidamente y su construcción no supone problema alguno para la atmósfera.
¿Se necesita dar de alta la luz y el gas en una casa pasiva?
En caso de que la vivienda sea de nueva construcción hay que dar de alta la luz por primera vez, así como el gas. En caso de que la vivienda sea nueva, lo normal es que ya haya suministro, aunque si se dio de baja también habría que dar de alta la luz y el gas. No obstante, en caso de que ya haya suministro, lo único que tendrás que hacer nada más llegar a tu nueva casa pasiva es realizar el cambio de titular.
¿Por qué cambiar de compañía de gas y de electricidad?
Merece la pena cambiar de compañía eléctrica y de gas natural cuando los precios por los suministros no son los más adecuados. Así, si piensas en que tus recibos energéticos son altos, es probable que necesites cambiar de compañía. Para asegurarte de que tienes la tarifa más adecuada lo único que tienes que hacer es utilizar un comparador energético, con la que será muy fácil que encuentres las tarifas al mejor precio del mercado.
Con la colaboración de Papernest
